Skip to main content

Ya lo hicimos con La Llorería, y esta semana volvemos a repetir con Brutalista. Primero lo fichamos en nuestra agenda gastronómica, luego nos falta tiempo para ir, y al hacerlo flipamos pero bien. Y es que mira que están abriendo cosas potentes en Madrid. El ritmo no para, y ahí estamos nosotros dándolo todo para recomendarte lo que mola (lo que no, no, ya sabes).

Se podría decir que lo que ha hecho Pablo López con Brutalista ha sido llegar y besar el santo, porque lo está petando con apenas un mes abierto, pero estaríamos pasando por alto sus anteriores etapas en Nakeima, Kena, Lera (el antiguo Mesón del Labrador), La Tasquita de Enfrente, o Tripea. Con este currículum, está todo dicho.

La carta de Brutalista es diferente, original, equilibrada, y atrevida, podría decirse. Según el mismo Pablo explica: «Hay escabeches, pelo, pluma, concha y huerta«, en unos menús cerrados (de 28, 38 y 50 euros, con algunos extras que también puedes pedir aparte) y para un máximo de 20 personas, donde el producto, la cocina viajera y la aparente sencillez son los que mandan.

Todo esto en un espacio rollo industrial, crudo, con paredes de cemento y decoración prácticamente nula, en «bruto», que acompaña al minimalismo de su propuesta.

Nosotros nos decantamos por el menú de 38 euros, y alguna que otra cerveza y copa de vino (natural). Te contamos.

Empezamos con el aperitivo, una magnífica Sobrasada Maldonado, que está para comerse 20.

Después, la Sardina ahumada con pan y mantequilla, por encima un miso dulce y aceite amontillado de Castillo de Canena. Y un sorprendente Gazpacho de tomates quemados, que te recomendamos rebañar con el pan de Panic hasta dejar el plato como nuevo.

Y después dos de los reyes del mambo en Brutalista (aquí se donde más se nota su experiencia en Lera). Primero el Pollo escabechado con ensalada de alubias, y luego su Conejo escabechado, un escabeche templado, al estilo castellano, que Pablo borda.

Luego, otro gran plato, una Crema de ajada, con alcachofa frita y criadilla de tierra.

Casi acabando, unas sabrosas Codornices fritas (del conocido proveedor Higinio Gómez), de las que únicamente quedaron los huesos pelados.

Y finalmente, cerramos con una Lubina al vapor sobre una salsa mezcla entre escabeche y ceviche (con leche de tigre), como el propio Pablo dice, es técnica china, pero sabores de aquí.

Postre, una Tarta de nueces (sobre masa quebrada), con nata montada. Bien, pero sin más… tal vez lo menos sorprendente de nuestra experiencia en Brutalista.

Con Brutalista estamos ante un restaurante que se aleja, mucho y a mucha honra, de la típica propuesta que tanto abunda últimamente en Madrid. Una valiente apuesta por los escabeches, principalmente de aves, por el producto de calidad con sutiles pinceladas de técnicas asiáticas, y todo ello con una sencillez difícil de conseguir. Los años de experiencia de Pablo López en diferentes casas, que se dejan entrever en cada elaboración. El ticket medio, también ayuda no solo a una, sino a pegarle muchas visitas, pues pagando entre 40/45 euros por persona, saldrás más que feliz.

Aquí te dejamos la web de Brutalista, y su dirección:

C/ Juan Álvarez Mendizabal, 34.

Suscríbete AQUÍ a nuestra newsletter para que te enviemos al mail, cada semana, todos nuestros planes y recomendaciones gastronómicas.

David

Buena dentadura, estómago de hierro, casi dos metros y un metabolismo maravilloso... una máquina de comer. Alguien tiene que hacerlo, así que como y bebo como loco para después contártelo y que vayas a tiro hecho.

Deja un comentario

Suscríbete a
nuestra newsletter

Déjanos aquí tu email y te mandaremos un correo a la semana con todos nuestros planes gastronómicos recomendados.

error: ¡Vaya! Nuestro contenido está protegido