Llevaba ya tiempo con antojo de un buen asador argentino, de una parrilla con buenos cortes de carne cocinados en las brasas, con conocimiento y con esencia… y entonces (hace menos de un mes) me enteré de que el chef Javier Brichetto tenía nuevo proyecto. Un restaurante puramente argentino en el que, según había leído, para cocinar las carnes usaban tanto métodos tradicionales como técnicas modernas en los hornos y parrillas que él mismo había diseñado. Las premisas no podían ser más atractivas para mi antojo carnívoro. Teníamos que visitarle, así que nos acercamos al restaurante Piantao.
Según entras por la puerta, te das cuenta de que aquí todo está más que cuidado y en armonía con la propuesta gastronómica. Desde la decoración, con un aire industrial que recuerda de algún modo, con sus vigas de hierro, su cemento, maderas y su ladrillo visto, a un antiguo matadero de reses, hasta el cuero de las sillas o la banda sonora (música argentina de los años 80), pasando por supuesto por la hipnótica zona de la parrilla, el alma de la fiesta en Piantao.
Lo que nos proponen aquí es bastante más que «una buena parrilla», es un viaje al corazón de Argentina, un restaurante con carácter, donde las brasas (hecha con quebracho blanco y encina de Aldea del Fresno) que tan bien domina Brichetto, son las protagonistas de una amplia carta divida en Entrantes, Ensaladas, Embutidos artesanales, Especialidades de cerdo ibérico, Novillos de la pampa, cortes de Vacuno mayor madurado (origen europeo), y sus Guarniciones caseras. Nosotros quisimos probar un poco de todo, dando a los cortes de carne la importancia que debían tener en la visita. Te contamos ya mismo lo que pedimos.
Tras un aperitivo de Crema de Calabaza (Zapallo en argentino) con quesillo, y una selección de panes argentinos (el pan casero, increíble) con manteca ahumada infusionada con té, empezamos el lío en Piantao con un maravilloso Chorizo criollo casero (70% ternera, 30% cerdo) acompañado de verduras encurtidas. Tradición y artesanía dentro de un excelente chorizo.
Seguimos con uno de los platos que más nos gustaron, su Empanada criolla de carne, cortada a cuchillo (con pimiento y cebolla), con salsa de tomate con un poquito de picante. Otra liga amigos.
Después, otro básico que no podía faltar, un Provolone madurado durante dos meses, con tomates asados y orégano fresco. De los mejores provolones que hemos probado nunca.
Y pasamos después ya al temazo principal de Piantao, con una Entraña de 300 gramos, acompañada de tomates asados. Sujétate, porque esto ya te hará empezar a vibrar desde el primer corte.
Después, una de las joyas de la corona, el Ojo de Bife, también de 300 gramos, al que le hincamos el diente sin piedad, y al que quise retratar, con un corte, al detalle, para que puedas apreciar la textura. Jugosidad máxima. De 10.
Por último, probamos su Vaca rubia gallega, madurada 40 días.
De postre, primero (tenemos mucho carrete, ya sabes), un Alfajor helado de dulce de leche con salsa inglesa y helado de Chocolate águila (argentino, claro está).
Y un Bombón de hierba mate, con alfajor de dulce de leche y helado de dulce de leche. Pues eso, más dulce de leche, a muerte.
Los vinos en Piantao, no podían ser sino argentinos, primero un Altas Cumbres (Salta, Torrontés 2018), y todo un acierto el tinto, Maria Victoria de Verum 2016, para la carne.
De aquí saldrás feliz, por muchos motivos. Se trata, a pesar de su corto recorrido, de un proyecto sólido que rezuma esencia argentina en cada bocado, y en cada detalle. Desde sus embutidos caseros, hasta sus entrantes típicos argentinos (y muy bien ejecutados, no dejes de pedir la empanada, ¡por Dios!), y por supuesto, su buen repertorio de cortes de carne. Brichetto es un master en esto de asar carne, y ya sabes, comer asado da felicidad. Con un ticket medio de 50 euros por persona, Piantao se me antoja una de las mejores opciones para los amantes de la carne en Madrid ahora mismo. Ojo, los fines de semana (sábados comida y cena, y domingos comida), Brichetto cocina un cerdo entero de 25 kilos, deshuesado, que no hemos catado, pero que por lo visto está para perder el sentido… iremos a por él, seguro ¡Grande Javier!
Por si quieres seguir más de cerca las andanzas de Brichetto en su nuevo Piantao, aquí os dejamos su perfil en Instagram.
Paseo de la Chopera, 69. (Frente al Matadero).
914 675 402