Noi, alta cocina italiana para todos los públicos

Pero, ¿cómo puede un restaurante italiano convertirse en tu favorito con tan solo una visita? Pues así ha sido. La semana pasada tuvimos la suerte de conocer, casi en primicia (apenas llevan un mes y poco abiertos), el novísimo proyecto del chef Gianni Pinto (ex Sinfonía Rossini) en Madrid. Se llama Restaurante Noi, y te lo aviso, a partir de ahora, cuando tengas antojo de italiano de calidad, será tu opción de cabecera.

El restaurante, ubicado en la gastronómica calle Recoletos, está divido en 4 zonas, y tiene una decoración que desde mi punto de vista, es una auténtica maravilla. Nada más entrar, encontrarás un par de salas pequeñas con mesas altas y una barra, más adelante, una primera sala (donde esté hecha la foto), y más adelante la mesa del chef (justo frente a la cocina), y al fondo del todo, una última y preciosa sala con luz natural procedente de un patio interior. Si a este ambiente le sumas que aquí se cuida hasta la banda sonora, el mood creado antes de empezar a comer es perfecto.

Entrando en materia gastronómica, lo que vas a encontrar en el Restaurante Noi (nosotros, en italiano) es cocina italiana, sí… pero está muy lejos de ser la cocina italiana de siempre. El estilo de Gianni es creativo, atrevido (aquí no te vas a encontrar nada clásico), lleno de matices, eso sí, sin perder la esencia italiana en un solo bocado. Imagino que a estas alturas estarás deseando saber qué te vas a encontrar en la mesa. Prepara el babero. Allá vamos.

De aperitivo, Tomate asado, acompañado de un crujiente de grissini, y queso ricotta. Esto, junto con un espumoso Foss Marai Brut, te entonan que no veas.

Entramos de lleno con el universo Carpaccio de ventresca de atún rojo, sandía asada y salsa de vitel toné. Un Vitello Tonnato 2.0 podríamos llamarlo. Acompañado de Focaccia con mantequilla y aceite. Una pasada, de los platos que más nos gustaron en Noi, y mira que el nivel nos sorprendió en general.

Seguimos con el frescor, con una Stracciatella (la parte más jugosa de la burrata), con calabacín escabechado, crujiente de puntilla de huevo (que le daba textura al plato) y ralladura de limón. Mezclas todo, y a volar. A estas alturas, nos tomamos una copa de Mastri Vernacoli Trentino Doc (Pinot Grigio) 2018.

Después, un Bacalao mantecado con pilpil y patata, con pimiento asado tradicional, aceite esencial de ajo y perejil, y pimientos fritos.

Pasamos a la Pizzeta frita con mozzarella de búfala, tomate siciliano, pesto de albahaca y rúcula. Impresionante la masa, crujiente, esponjosa… Plato adictivo.

Y entramos en el mundo pasta, Gnocchis tostados con anguila ahumada, brotes frescos, aceite de pimentón y perejil, y fondo de cacciucco (un pescado muy trabajado en Italia).

Y por último, Caserecce con salsa de pimientos asados, guanciale y menta. El dominio de la pasta es marca de la casa.

De postre, una obra maestra que ya tocaba Gianni en Sinfonía Rossini, y que ya nos dejó con la boca bien abierta, su versión de Tiramisú. No te cuento cómo la elabora, para que la sorpresa sea máxima cuando vayas al Restaurante Noi.

Le seguíamos la pista desde hace años, y ahora acaba de regresar al panorama madrileño con este sólido proyecto, que estamos seguros de que le va a traer muchas alegrías. La mezcla de la tradición con la modernidad, y de la clásica trattoria con la alta cocina italiana, es todo un acierto en el Restaurante Noi. Cuidado estético dentro y fuera del plato, sabores italianos pero interpretados desde una perspectiva muy personal del chef Gianni Pinto y de su jefe de cocina, Javier Gassibe. Y una sala más que a la altura, con el sumiller Gabriel Medina y Gabriele Manzuto formando muy buen tándem. Con un ticket de 45 euros por persona, estamos ante, como decíamos al comienzo, un restaurante italiano muy diferente, que desde ya se ha convertido en nuestro favorito. Nota, si te gusta comer viendo a los chefs en acción, no dejes de reservar en la mesa del chef.

Por si quieres seguir más de cerca a Gianni Pinto y a su Restaurante Noi, aquí os dejamos su cuenta de Instagram.

C/ Recoletos, 6.