Cuánto se oye hoy en día, en el panorama gastronómico, aquel soniquete de «cocina de mercado y de producto»… ¿verdad?, pero qué pocos son los restaurantes en los que cuidan esto como debe ser, milimétricamente. El Restaurante Álbora es uno de los más firmes ejemplos de cómo se pueden hacer las cosas maravillosamente, sin necesidad de demasiadas filigranas, simplemente con un productazo.
Sí… y es que el grupo Álbora parece un Dream Team, por un lado está José Gómez (Jamones Joselito), por otro Cayo Martínez (Conservas La Catedral de Navarra), en la sala y la gestión, Jorge Dávila (Premio Nacional de Gastronomía 2012), y Jose María Marrón, y por último, Juan Antonio Medina como chef coordinador de la oferta gastronómica del grupo, y Raúl Prior en la cocina del Restaurante Álbora (estrella Michelin 2014 y dos soles Repsol).
Un espacio de 800 metros cuadrados, divididos en dos plantas, la de calle donde se puede comer la carta de barra, y la planta de arriba, donde está el restaurante gastronómico, y tienen disponible para los clientes otra carta diferente, así como dos menús degustación, el corto de 58 euros, y el largo de 78 euros (ambos sin vino ni IVA). Tanto en barra como en la sala, la base de la cocina es la tradición y la temporada, con una cuidada selección de productos, varios de ellos procedentes tanto de Joselito, como de Conservas La Catedral), y nosotros hemos querido probar la opción de la carta de barra, sentándonos en una de sus cómodas mesas altas cercanas a la puerta de entrada.
Esto fue lo que pedimos, prepárate, y toma buena nota que es todo un espectáculo.
Ensalada con tomate raf, burrata y helado de albahaca. Buena burrata, tomates con saborazo.
Con un vino blanco, Avancia Cuvee de O, un godello muy equilibrado, con buena acidez y buena fruta fresca.
Croquetas de jamón ibérico Joselito, cremosas, con buena dosis de tacos de jamón. De 10.
Bocata de pan de algas con chipirones y mayonesa de jamón. Muy sorprendente, y los chipirones tiernos como ellos solos.
Tosta de centeno con pastrami ibérico Joselito y encurtidos. Muy buena tosta, si señores… y el pastrami, como os venía deciendo, marca de la casa. Buenos productazos se gastan en el Restaurante Álbora.
Tacos de merluza a la romana con salsa tártara. La cocina de la abuela, llevada a su máximo esplendor.
Con un tinto, Cepa Gavilán Crianza 2014, un Ribera del Duero al que tal vez podría faltarle algo de recorrido, pero que le iba perfecto a lo siguiente.
Bacalao confitado, con guiso de garbanzos y tendones de ternera a la madrileña. Atrevido, lleno de matices y potencia, gran guiso en la carta del Restaurante Álbora.
Pluma ibérica Joselito, con crema de patatas y piquillos confitados La Catedral. Cómo no íbamos a pedir esta pluma, que desde que la leí en la carta tenía mi nombre. Cuando vayas, acuérdate, es un MUST.
Y eso no fue todo, no… pedimos un par de postres, que también es otra de las especialidades en el Restaurante Álbora. Torrija caramelizada con helado de canela.
Y cremoso de mascarpone con mango, crema de limón, y bizcocho de coco.
Otra pedazo de referencia madrileña que no podía faltar en nuestra página. El Restaurante Álbora es uno de esos básicos que hay que conocer, y que son un seguro de vida para cualquier ocasión. Nosotros nos pasamos tres pueblos pidiendo, como has podido ver, pero el ticket medio pidiendo la carta de la barra suele rondar los 35-40 euros, y los menús degustación ya te lo dije más arriba al comienzo del post. Éxito merecidísimo, gran carta, gran producto, y gran servicio de sala. Por eso va para ellos nuestra recomendación de la semana.
Aquí os dejamos la web del Restaurante Álbora, su Facebook, Twitter e Instagram:
Calle Jorge Juan, 33
Horario Cocina Restaurante (planta superior): Lunes a Sábado: 13.30 a 16.00h – 20.30 a 23.30h Domingo Cerrado.
Horario Bar y Terraza: Lunes a Sábado: de 12.00h a 24.00h Domingo abierto hasta las 17,00h.
Fotos: Gregorio González