Desde que conocimos a Fernando Limón (Marzo 2016), siempre hemos estado siguiéndole los pasos. Este intrépido chef lleva años sorprendiendo a sus clientes de La Sopa Boba, en Alpedrete, con su cocina creativa, de producto, sin más etiquetas y con grandes dosis de diversión. Cuando nos enteremos de que era asesor gastronómico de un nuevo proyecto, Koma Bah, y de que además este restaurante estaba ubicado dentro de La Torre Box Art Hotel, en Collado Mediano, supimos que tocaba escapada. Así que dejamos a la peque con los suegros (benditos) y nos fuimos a la sierra.
Esta antigua casona del siglo XIX ha sido convertida por Pilar Guillén y Ángel García, sus propietarios, en un pequeño hotel con apenas 7 habitaciones donde diseño, arte, relax y gastronomía se mezclan de maravilla. Su piscina (con jazz de fondo, lo máximo), sus rincones, su aire fresco, su spa… y el mimo con el que los dueños cuidan a cada huésped son motivos más que suficientes para dejarse caer por La Torre Box Art Hotel. Si a esto le añadimos el hecho (importantísimo para todos nosotros) de que cuentan con una cuidada propuesta gastronómica en Koma Bah, la visita es obligada.
El espacio en el que está situado el restaurante es perfecto, lleno de luz, rodeado por árboles y mucho verde. Dentro, encontramos una decoración muy cálida, no muchas mesas, y un personal lleno de sonrisas. Aunque puedes pedir a la carta, te recomendamos que hagas como nosotros, que fuimos a por el menú degustación elaborado por el chef Javier Molero. Ya mismo te contamos en qué consiste.
Para empezar y como nos recomendaron, nos tomamos un Cóctel con sake, piña, y sirope de ágave, y un Vermú rosado. Con ambos, abrimos el apetito hasta el extremo.
Y comenzamos con el menú degustación con Curry verde de verduras. Como verás, en todos los platos de Koma Bah, y aquí se nota la mano de Fernando Limón, Asia (en todas sus vertientes) es el denominador común. Sencillo pero sabroso curry.
Seguimos con el Falso nigiri, que son croquetas de kimchi, con atún en sashimi, dados de gelatina de soja y alioli de wasabi. Buenas sensaciones con este comienzo en Koma Bah.
Gyozas de carabinero, con salsa americana thai y semillas de chia. Buena fritura y un toque de picante muy sutil.
Después, el Pan Bao (casero) con panceta a baja temperatura, con hoisin de fresa, cebolla roja encurtida, y hojas de menta y cilantro. Aunque visualmente no es precisamente atractivo, realmente te metes un buen punch de sabor y frescor en cada bocado, ¡que al final es lo que cuenta!
El Pez mantequilla marinado en miso, con salsa tártara japonesa y setas shitake encurtidas.
Tataki de atún sobre baba ghanoush y pesto de algas, y por encima shichimi togarashi y sésamo con wasabi.
Y para acabar, las Carrilleras de ternera al curry rojo, con risotto de trigo sarraceno. Creo que si tengo que elegir un plato del menú degustación de Koma Bah, me quedo con este… y mira que ya andábamos tocados, pero cayó, vaya si cayó.
De postres, su Arroz con leche de coco, fresa lyo, nubes de yuzu y sésamo garrapiñado, y el Tiramisú con Haba Tonka.
Resumen de la experiencia: pero que muy recomendable. Poder escaparte a la sierra a menos de una hora de Madrid, a un auténtico remanso de paz (ojo, que solo pueden ir niños a partir de los 12 años), para dejarte cuidar por el equipo de La Torre Box Art Hotel, y además de todo esto, comer rico, es un lujazo. El menú degustación de Koma Bah sale a 45 euros por persona (sin bebida), y si ya que estás, quieres quedarte a dormir en el hotel, aquí puedes ver algunos de sus «packs» diseñados para sus experiencias gastronómicas. Lo dicho, ¡tienes que ir pero ya!
Aquí os dejamos la web de La Torre Box Art Hotel, su Twitter, Facebook e Instagram.
Paseo de Rosales, 48 (Collado Mediano)
918 558 558
