Isabella, sencillas recetas italianas con alma brasileña

Andaba hace unos días en la búsqueda de los restaurantes italianos elegidos para entrar en el ranking de la mejor pasta de Madrid, cuando recordé que me había guardado en Instagram dos nuevos fichajes por visitar, a El Bacaro ya había ido, y me quedaba un italiano muy diferente (luego te explico por qué), pero igualmente con pintón, te hablo de Isabella.

Detrás de este proyecto está un matrimonio de brasileños, de São Paulo, Valter Sambrana y Ana Navarro, quienes junto con el chef Carlos Eduardo Gasparini (Cadu, para los amigos, formado en la prestigiosa Escuela Internacional de Cocina Italiana Alma) llevan un par de meses apostando por unir sus dos culturas, brasileña e italiana, mediante recetas caseras, elaboradas allí mismo (en la planta inferior tienen el obrador donde hacen todas su pasta fresca), a diario.

No tenía yo conocimiento de este dato, pero resulta que la comunidad italiana en Brasil es bien grande, y la cultura gastronómica italiana se ha extendido enormemente, sobre todo en el sudeste brasileño. Así, los viernes y los sábados, el plan allí es comer pizza, y los domingos, reunidos en familia, darle a la pasta (siempre fresca). Eso fue exactamente lo que hicimos en Isabella.

El local es enorme, con capacidad para unas 100 personas, con techos altos (tiene dos plantas), y con mucha luz natural gracias a su enorme ventanal que te da la bienvenida. Una carta donde la Pasta fresca y las Pizzas son las protagonistas, pero donde no puedes dejar de pedir sus interesantes Antipasti. Sin más, te contamos qué pedimos. Ponte el babero 😉

Empezamos nuestra experiencia italo-brasileña en Isabella con un Suppli, una Croqueta de risotto con queso, típica de Roma, parecida al Arancino de arroz (de Sicilia). Crujiente, sabrosa. Buen comienzo.

Y después quisimos probar dos salsas, que no te vas a encontrar en ningún otro sitio en Madrid. La primera, Sardella, es una pasta de pimientos rojos y anchoas, y la otra, Alichela, está elaborada con anchoas, perejil, guindilla, todo muy picado, y aceite. Al lado, pan de Panic. Por lo visto son dos salsas típicas de los italianos en Brasil, y ¡o te imaginas cómo están!

Y seguimos en Isabella con el festival de pasta, con los Tonnarelli Carbonara, receta clásica, con guanciale, pecorino y yema de huevo, para la cual usan esta versión más gruesa. Super untuosa y sabrosa, esta carbonara.

Luego, los Pappardelle al ragú, elaborados con una carrillera de ternera cocinada durante 12 horas al vino tinto. Esto está escandaloso.

Y el último plato de pasta, los Gnocchi dorato, hechos con patata y queso manchego (en la masa), se cuecen, se fríen en sartén, y después echan tomate, rúcula y ricotta salado.

Como ya íbamos tocados, pedimos solamente una pizza. Su Pizza Portuguesa, con mozzarella, cebolla, jamón york, aceituna kalamata y huevo de codorniz. Una pizza «a la brasileña» más que original, con una masa bastante más consistente y crujiente, gracias a la cocción en su horno (italiano) durante más tiempo, y a menor temperatura. Cualquiera de las pizzas de la carta se puede pedir con masa negra (con 10% de harina de carbón vegetal), así lo hicimos.

De postre, su Tarta Cioccolato, con chocolate Valrhona, helado de yogur, aceite, y flor de sal Maldon. Sencillo postre, pero también a muy buen nivel, como todo lo que probamos en Isabella.

Resumiendo, muy buena experiencia en Isabella. La premisa del combo entre Brasil e Italia ya de por sí es atractiva. Pero cuando todo casa, cuando los Antipasti son así de originales, los platos de pasta fresca (con mención especial para esos Pappardelle) están de muerte, y la pizza tampoco baja el nivel (arriesga y pide la que sea, pero con masa de carbón vegetal) se convierte en un restaurante que cumple lo que promete, comida italiana sencilla, pero muy rica. Para volver, y también recomendar. El precio, también ayuda, hablamos de un ticket medio de unos 25-30 euros por persona, si no se te va mucho la mano pidiendo.

Por si quieres seguir la pista del restaurante Isabella, aquí os dejo su perfil de Instagram.

C/ Claudio Coello, 114.